Cómo obtuvo ayuda Nahuel
Casi 1 de cada 4 adultos en los EE. UU. ha tenido problemas de salud mental en el último año. Nahuel es uno de ellos.
Nahuel tiene muchas metas para el futuro. se siente orgulloso de su cultura. siempre se preocupa por los demás.
También tenía sentimientos de depresión y agotamiento todos los días.
Hasta que recibió tratamiento.
Darse cuenta de que algo no está bien
A sus 20 años de edad, Nahuel, nacido aquí en Estados Unidos e hijo de padres inmigrantes, se siente abrumado con sentimientos de tristeza. No es solamente una cosa lo que lo está molestando, son muchas. Es el estar lejos de su abuelita, su mejor amiga, que se quedó en su tierra y a la que no puede ver desde hace mucho tiempo. Es el hecho que toda su vida sus padres, con sus costumbres tradicionales, lo han criticado por no hablar español como ellos. Es el hecho que no importa qué hace, con quién hable o dónde esté, siempre siente que no pertenece ni aquí, ni allá. Y es más que nada, la responsabilidad que siente de proteger a sus padres y no contarles del abuso que sufrió en su niñez a manos de un familiar. Ese silencio lo castiga todos los días, es demasiado. Sin embargo, un día, por curiosidad y pensando en su abuelita que siempre lo anima, busca en línea "¿son comunes los pensamientos suicidas?, ¿es normal tener pensamientos de quitarme la vida?" y se da cuenta de que probablemente necesita ayuda.
Pedir ayuda
Nahuel se tomó unos días para tratar de descubrir cómo obtener ayuda, pero todo se siente demasiado estresante. Le preocupa que lo etiqueten y lo juzguen. No sabe por dónde empezar. Nahuel no puede obtener una cita para ver a su médico habitual hasta dentro de unas semanas más, y le causa nervios la idea de hablar con su hermana al respecto porque ella siempre le dice que los hombres no lloran y que deje de quejarse.
Nahuel decide abrirse a su amiga Daniela, que siempre ha sido una amiga que no lo juzga. Nahuel le pide a Daniela que se reúnan en el parque el sábado para que puedan hablar cara a cara. Daniela le pregunta a Nahuel qué puede hacer para ayudarlo. Nahuel le dice que quiere hablar con un terapeuta lo más pronto posible y que le gustaría que el terapeuta sea alguien como él: una persona latina que hable inglés y que entienda lo que viene con ser americano de primera generación. Daniela dice que intentará preguntar por ahí.
Superar una crisis
Mientras Nahuel y Daniela buscan un terapeuta, Nahuel se entera que su abuelita tiene cáncer. La noticia es casi demasiado, él siente que ya no puede más. No sabe cómo podrá soportar estar tan lejos de su Rosita, su abuelita querida, mientras que ella enfrenta su dura enfermedad. Pasará mucho tiempo antes de que él pueda ahorrar lo suficiente para poder ir a verla. Nahuel siente que nadie entiende su tristeza o puede ofrecerle ayuda. Justo en ese momento recuerda que hay una línea de crisis de salud mental para llamar y marca 988 para hablar con un consejero de crisis capacitado de inmediato.
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Daniela ayuda a Nahuel a llamar a terapeutas por toda la ciudad, pero no puede encontrar uno que acepte su seguro. Nahuel finalmente ve a su médico, quien encuentra una cita con un terapeuta que entiende su cultura y trabaja con muchos clientes como Nahuel: jóvenes que son hijos de inmigrantes, nacidos aquí y que no hablan español.
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Esperar el tratamiento
Nahuel siente preocupación acerca de su cita de terapia. ¿Qué le preguntará el terapeuta? ¿El terapeuta tomará en serio a Nahuel? ¿Entenderá el terapeuta su identidad como primera generación americano? ¿Cómo se sentirá después de ir? Nahuel busca información en línea para saber qué sucede en una cita de terapia y se siente un poco mejor.
Nahuel finalmente se encuentra con el terapeuta y expresa su nerviosismo. El terapeuta le asegura a Nahuel que esos son sentimientos normales y que Nahuel no tiene que hablar de nada de lo que le incomode. Después de un par de sesiones, Nahuel comienza a sentirse más a gusto y le resulta más fácil expresar sus sentimientos.
Obtener ayuda, sentirse mejor
Después de unos meses, Nahuel sigue viendo regularmente a su terapeuta y está tomando medicamentos para ayudarle a superar este momento difícil. Se abrió más con Daniela y compartió con algunos otros amigos que va a terapia y descubrió que algunos de sus amigos también lo hacen. Ahora, él siente menos soledad en general. Nahuel incluso ha captado algunos momentos últimamente en los que se sintió de una manera que podría llamar normal. Estos momentos le dan esperanza a Nahuel.
El terapeuta de Nahuel explicó que mejorar es como una espiral ascendente: que no todos los días son buenos, pero la tendencia general es positiva y va en aumento. Incluso en sus días malos, Nahuel al menos sabe que va en una mejor dirección.